Más de 439.000 personas en Brasil, Chile, México, Nicaragua y Venezuela, se beneficiarán de estos proyectos que cuenta con el apoyo de la agencia de la ONU para la agricultura. La mayoría de los beneficiarios son pequeños y medianos productores, muchos ligados a poblaciones indígenas. La mitad serán mujeres.
El Fondo para el Medio Ambiente Mundial aprobó este lunes 27 millones de dólares para proyectos de restauración de paisajes y ecosistemas y de conservación de la biodiversidad en cinco países latinoamericanos.
Los gobiernos de Brasil, Chile, México, Nicaragua y Venezuela aportarán 184 millones de dólares en cofinanciamiento e implementarán los proyectos con apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Más de 439.000 personas serán beneficiadas, la mayoría pequeños y medianos productores, muchos ligados a poblaciones indígenas. La mitad serán mujeres.
“Estos proyectos contribuirán a avanzar en sistemas agroalimentarios más amigables con los ecosistemas, mejorando los medios de vida de miles de personas, bajo una perspectiva de igualdad de género y participación de comunidades indígenas. Asimismo, incorporan un enfoque para reconstruir mejor (esos sistemas) tras la pandemia, con énfasis en medios de producción, mercados más sostenibles y resilientes, reducción de la pobreza, e inseguridad alimentaria y nutricional. Es un paso más para alcanzar los objetivos del desarrollo sostenible y la agenda 2030”, explicó Ignacia Holmes, oficial de Agricultura Sostenible y Resiliente de la FAO.
La agencia ha apoyado a los gobiernos de 29 países de la región a diseñar e implementar 58 proyectos que han movilizado más 224 millones de dólares del Fondo para el Medio Ambiente Mundial.
El proyecto en Brasil busca fortalecer el proceso de gestión participativa de los recursos naturales, conservar la biodiversidad, e incentivar la conservación de las reservas de carbono en las áreas húmedas del Amazonas.
El proyecto se implementará en tres Estados: Pará, Amapá y Amazonas. Se estima que sus acciones tendrán un impacto en cerca de 6000 personas, y más de 18 millones de hectáreas.
La iniciativa será coordinada por el Instituto de Desarrollo Sustentable de Mamirauá, y con el apoyo del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovaciones y de la FAO.
En Chile, el proyecto beneficiará a 10.000 personas y tiene como objetivo restaurar paisajes ambientalmente vulnerables para favorecer la recuperación de la productividad de los sistemas silvoagropecuarios y sus entornos naturales, mediante el manejo sostenible programado.
Será implementado por el Ministerio de Medio Ambiente de Chile, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) y la FAO, en cinco regiones: Coquimbo, Valparaíso, Libertador Bernardo O’Higgins, Maule y Biobío.
El proyecto de México buscará incorporar la conservación de la biodiversidad, la gestión integrada del paisaje y la conectividad de los ecosistemas en programas sociales de México, tales como Sembrando Vida.
La iniciativa se implementará en las localidades de Durango, Montes Azules y Huasteca, e impactaría a cerca de 371.000 personas, la mitad mujeres.
El proyecto también busca reconstruir mejor los sistemas agrícolas tras la pandemia de COVID-19 y se implementará por la Comisión Nacional Forestal de México, la secretaría de Bienestar, la secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, el Instituto de Economía Social y la FAO.
Conservar la biodiversidad de importancia global y mejorar los servicios ecosistémicos en la Reserva Biológica Indio Maíz, junto a los pueblos indígenas y comunidades locales, es el objetivo del proyecto de Nicaragua, que podrá beneficiar a cerca de 5000 personas en el departamento Río San Juan.
A través de un enfoque de paisaje, integrado, holístico y multisectorial, la iniciativa será implementada por el Ministerio del Ambiente y los Recursos Naturales de Nicaragua y la FAO.
El proyecto de Venezuela se ejecutará junto a productores de 12 municipios del eje cafetero y cacaotero en la región andina de Venezuela, para promover la conservación y uso sostenible de la biodiversidad, detener y revertir la degradación de la tierra y la deforestación, y gestionar los bosques de manera sostenible.
El Fondo para el Medio Ambiente Mundial financiará un monto de 5,3 millones de dólares, y se espera que Venezuela aporte 45,6 millones al proyecto. Se proyectan beneficios para cerca de 47.000 personas, la mitad de estas serían mujeres. El proyecto será puesto en marcha por la FAO, y ejecutado por el Ministerio del Poder Popular para el Ecosocialismo.
Información proporcionada por: noticiasonu.com